El próximo 23 de septiembre de 2018 dejará de ser válido el certificado basado en la norma ISO 9001:2008. Se concedió un periodo de transición de tres años para las empresas con un certificado vigente según la norma ISO 9001:2008. Antes del 15 de septiembre de 2018, debe estar realizada la transición, sino, perderá la certificación y necesitará iniciar un nuevo ciclo de certificación.
El comité técnico de ISO decidió en 2012, a través de las encuestas de usuarios, la necesidad de que los sistemas de gestión tuvieran una estructura común que permitiera integrar distintas normas ISO de una misma empresa. La actualización ha sido creada para mantener el nivel de calidad de las empresas en todo el mundo.
La implantación a la nueva norma ISO 9001:2015 contribuirá de forma significativa al desarrollo estratégico de la empresa, menos descriptivo y más enfocado a resultados. El enfoque es preventivo para lo que utiliza un análisis de riesgos y oportunidades, e identifica los factores externos e internos de la empresa. Los objetivos de los procesos persiguen la satisfacción de los clientes.